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FIAIZ

Juan 125

CVJ 

Domingo,  25 de noviembre de 2012

 

VIDA ACOMPAÑADA

 Plan de oración con el Evangelio de Juan

 

 

125. Jn 19,1-3

 

Introducción:

 

                La burla, la frase mordaz, las palabras mordaces son, con frecuencia, el arma que exhiben los débiles. Como no tienen razón, ironizan y desprecian para imponerse. Pero, por mucho que lo hagan, siguen sin tener razón. Y lo peor de todo: burlarse de los débiles, de los pobres, de los indefensos, de los frágiles. Esta burla es el súmun de lo inhumano. Lo contrario sería tomar en serio a toda persona, sobre todo a quien está en mayor desamparo. Tomar en serio al otro no quiere decir que haya que estar siempre ante él con el ceño fruncido. No, el buen humor y el disfrute son valiosos. Quiere decir que la vida de quien tengo delante merece toda consideración y que yo se la doy.

                La escena evangélica de esta semana esa una escena de burla, más que de castigo. Se burlan los soldados de quien es ya un erradicado de este mundo, un condenado a quien se le puede robar todo, hasta la dignidad. Se burlan con una corona de matas, como si fuera un rey loco; con un manto “color púrpura”, no de púrpura que era la vestidura regia. Se burlan haciendo un saludo militar (la mano alzada) que termina en una bofetada. Él, Jesús, había tomado en serio a todo el mundo; hasta los más indefensos encontraron en él alguien que escuchaba, que acogía, que daba importancia a sus pobres caminos. Y, en contrapartida, él no fue tomado en serio cuando le cercaba la desgracia. Quizá en esos momentos, además de un fuerte desamparo, sintió como nunca el amor abrazador del Padre.

***

 

Texto:

 

19,1Entonces Pilato tomó a Jesús y lo mandó azotar.

2Y los soldados trenzaron una corona de matas, se la pusieron en la cabeza

y le echaron por encima un manto color púrpura;

3y, acercándose a él, le decían:

                -¡Salve, rey de los judíos!

Y le propinaban bofetadas.

 

***

 

Ventana abierta:

 

 

Estos son integrantes de una moderna ONG que se denominan: Stop desahucios. Ya sabemos su cometido: intentan frenar el tsunami de desahucios que asuela nuestra sociedad. Para denigrarlos, se les acusa de antisistema cuando, en realidad, su objetivo es mejorar una de las indignidades del sistema. Ellos creen que se puede cambiar la sociedad y han empezado a hacerlo bu7scando protección a los más frágiles. Solamente falta que la política sea capaz reofrecer respuestas claras, sensibles y eficaces para nuestra sociedad sea mejor.

                Oramos: Gracias, Señor, por quienes se mantienen sensibles a la causa de los débiles; gracias por quienes toman en serio las situaciones de los pobres; gracias por quienes aportan humanidad al hecho social.

 

***

 

Desde la persona de Jesús:

 

                Estremece en este relato el silencio de Jesús y su rostro que recibe la bofetada injuriosa. Casi sentimos su chasquido. Non era que no le afectaba la burla; él la sufría hondamente, en proporción al amor que tenía a las personas. Pero sabía encajar la adversidad. Eso lo había aprendido desde niño, desde su pobre nacimiento hasta hoy. Entendió que era preciso aprender a abrazar la adversidad, no para darle carta de ciudadanía sino para decirle: vives conmigo, pero no tendrás la última palabra.

                Oramos: Te alabamos, Señor, por tu fuerza interior; te bendecimos por tu capacidad para abrazar la adversidad; te bendecimos por tu corazón resistente.

               

***

 

Ahondamiento personal:

 

                Para generar humanidad en torno a nosotros se requiere, entre otras cosas, tener controlado el mecanismo de burla y menosprecio que puja por salir en situaciones que nos superan. Antes que menospreciar a nada o a nadie es preciso hacer acopio de escucha, comprensión y paciencia. Quizá también haya que mirar con benignidad. El tema de la mirada es decisivo para no sucumbir al desprecio. Una mirada benigna abre las puertas del corazón; una mirada burlona, genera alejamiento.

                Oramos: Que escuchemos con templaza a quien lo pasa mal; que hagamos derroche de paciencia con quien está herido/a; que miremos con benignidad los caminos de los frágiles.

 

***

 

Desde la comunidad virtual:

 

                Una de las “razones” por las que se nos hacen gratas las convivencias y nuestra relación de “comunidad virtual” es porque no hay atisbos de burla o menosprecio, sino todo lo contrario. Un aprecio sincero e interesado por los caminos del otro crea un marco de disfrute y de acercamiento que nos enriquece. Siempre hay algún motivo para alegrarse con el otro/a. Son los frutos buenos de la comunidad.

                Oramos: Que nunca aparezca el. menosprecio en nuestras relaciones comunitarias; que el interés por los caminos de los demás no mengüe; que siempre encontremos motivos para el disfrute común.               

 

***

 

Poetización:

 

Hasta el más débil,

el más pequeño,

el más niño,

encontraron acogida en él.

Siempre los tomó en serio,

siempre le interesaron sus caminos,

siempre los miró con acogida.

Despreciar al otro,

burlarse de él,

tomarlo a broma,

era como reírse de Dios.

Por eso mismo

nunca hirió,

jamás avergonzó,

no puso en ridículo a nadie.

Tal vez por eso

le dolieron más

las burlas de los guardias,

Sus risas inhumanas,

sus gestos humillantes.

No merecía ese trato,

por mucho que fuera

un condenado.

Pero lo encajó

con la mayor paz que pudo.

En medio de aquella hoguera de mal

estaba la brisa fresca

de la caricia del Padre.

Y él, seguramente que la sentía.

 

***

 

Para esta semana:

 

                No te burles del débil; se paciente; muestra interés por sus caminos sencillos.

***

1 comentario

Hno Javier -

Hermosa y Verdadera publicación! Paz y Bien!